Tratamiento para la fisura anal, de rápida mejoría

Muchas personas arriesgan su salud y prefieren soportar el dolor día a día al evacuar, por pudor, por temor a que los tratamientos sean dolorosos o por miedo a las secuelas.

Realmente, los rumores sobre la atención coloproctológica se han mantenido durante años y años, a pesar de que los avances en procedimientos, en medicamentos, en instrumental y en rehabilitación han disminuido en gran medida las molestias durante y después del tratamiento.

Uno de los avances más importantes en esta área es la aplicación de Toxina Botulínica, conocida popularmente como Botox, como solución para la fisura anal crónica, sin requerir cirugía, sin dejar secuelas y sin provocar molestias excesivas en el paciente.

Fisura anal

La fisura anal es un desgarro en la piel del canal anal, clínicamente caracterizada por dolor anal intenso, durante o tras la defecación, y por sangrado leve o moderado. Una Fisura Anal puede ocurrir por algo tan simple como una evacuación con esfuerzo, con excremento duro y voluminoso, o también por una diarrea, ya que las evacuaciones líquidas tienen un Ph más ácido, lo que puede macerar la piel del ano y ocasionar la fisura.

También surge este padecimiento por abuso sexual, trauma por algún accidente o incluso una cirugía previa cuya cicatrización no fue la adecuada.

Cómo actúa la Toxina Botulínica

El tratamiento consiste en inyecciones de Toxina Botulínica en el esfínter anal, con anestesia local, que tardan cuatro meses en degradarse en el cuerpo. Esta sustancia relaja el esfínter durante el tiempo suficiente para que una lesión anorrectal cicatrice adecuadamente, aun en pacientes diabéticos, con trastornos circulatorios o inmunosuprimidos. Una vez cicatrizada la fisura anal tras ser tratada con toxina botulínica es frecuente la recidiva en los siguientes 2 años.

Beneficios de la Toxina Botulínica

Los principales beneficios y puntos a favor de la toxina botulínica, comparado con la esfinterotomía, en la que se corta un pedacito del esfínter anal, son:

• Se puede realizar en proceso en el consultorio

• No requiere hospitalización

• No es necesario bloqueo bajo anestesia epidural

• El paciente puede retomar sus actividades de inmediato

• No conlleva riesgo de padecer incontinencia anal más adelante

Si tienes molestias, no dudes en contactarme para resolver tu caso. Puedes agenda tu cita en Guadalajara al +52 (33) 3641 · 5399 y en Monterrey al +52 (81) 8333 · 6699.

Los tratamientos ya no son un cuento de terror, lo que sí es un cuento de terror, es vivir todo el tiempo con dolor.